LA REFORMA PROTESTANTE

Hace 500 años tuvo lugar el inicio de la llamada reforma protestante iniciada por Martin Lutero, aquellos que lo siguen, han aprovechado esta conmemoración para presentárnoslo como un personaje extraordinario, valiente, providencial que se enfrentó con sobrada razón a los abusos e inmoralidades de la corte papal. Lutero seria el gran libertador de los cristianos, su epopeya habría roto las cadenas que tenían  a la palabra de Dios, amarrada y sometida al árbitro de los papas. La reforma protestante seria el ideal de lo que debe ser la Iglesia, la reforma seria libertad;  el  catolicismo es  esclavitud, sometimiento oscuridad, ignorancia, herejía, de tanto escuchar esta propaganda interesada, muchas personas poco informadas por la verdadera historia de los hechos, corren el peligro de dejarse arrastrar por la corriente. “Católico ignorante futuro protestante”. Los católicos debemos instruirnos, darnos cuenta de lo que en verdad paso, de cómo se desarrollaron los hechos, cuáles fueron sus causas y las consecuencias para la Iglesia de Cristo.

Debemos conocer cuáles son los rasgos, las características, las reglas de fe del protestantismo actual, para no dejarnos sorprender. Hay mucha literatura buena a nuestro alcance en internet, en YouTube, en páginas de historia, apologética y teología. En los comentarios anteriores decía: que la iglesia católica está atravesando una gran crisis, según afirman algunos entendidos, cada día alrededor de 8,000 católicos pasan a formar parte  de alguna de las llamadas iglesias evangélicas, se trata del fruto de un protestantismo proselitista a toda costa que no reúsa ningún medio para arrastrar a los católicos mal formados, a este paso la iglesia católica corre el gran peligro de ir desapareciendo para ser reemplazada por una constelación de sectas protestantizadas.  Eso es sumamente grave para la salvación de las almas porque significa la perdida de la mayoría de los medios de salvación instituidos por Jesucristo.

En el diario espiritual la virgen María no habla explícitamente del protestantismo, ni de Martin Lutero, ni de Calvino, ni de Enrique Octavo, ni de personajes alguno ligado a esta corriente, pero aunque no mencione para nada estas figuras ni a las sectas nacidas de ellos, nuestra señora a lo largo del diario va desmontando una por una, todas las tesis y prácticas de la reforma de Martin Lutero y de sus seguidores hasta darnos las pautas de lo que debe ser la iglesia verdadera. La virgen no ataca, no denuncia, no hiere, no ofende, no reprocha a nadie sus errores, como una madre amorosa y comprensiva prefiere mostrar el infinito dolor de su corazón por los sufrimientos de su hijo, ante los desastres que hemos provocado en la Iglesia. Más aun la virgen llora, por todos los seres humanos que están alejados de su hijo y en peligro de condenación eterna. María no se contenta con mostrar su dolor sino que los llama a tomar parte activa en la edificación de la verdadera iglesia del señor. A ella estamos llamados todos los hombres.

El punto de partida de la reforma Luterana es un enfrentamiento violento con el papa. El pretexto lo toma de los abusos que se dan entorno a la venta de las indulgencias, el carácter del fraile es acalorado, apasionado, se deja llevar por un temperamento impulsivo e imprudente, entra en discusiones cada vez más violentas y termina rechazando la autoridad del papa y de la jerarquía. Lutero y sus seguidores emprenden el camino de reformar esa iglesia que ellos consideran traidora al evangelio y corrupta moralmente hablando. Muchos se unen a este movimiento, Lutero y los suyos apoyados por los príncipes y políticos de la época que veían la oportunidad de apoderarse de los bienes de la iglesia consuman la separación. La iglesia nos habla de cómo los templos fueron profanados, las imágenes quemadas, los altares rotos, la santa misa suprimida, los sacramentos negados, los conventos abandonados por los frailes y monjas, el celibato suprimido, los fieles católicos perseguidos.

A medida que se extiende esta nueva concepción de una iglesia sin autoridad en la que cada uno es libre de actuar guiado por el Espíritu Santo, van surgiendo imitadores y seguidores por todas partes. Lo que se da es una verdadera revolución contra la iglesia que preside el papa.  La semilla sembrada por Lutero es recogida por  Zuinglio y Calvino en Suiza. Enrique Octavo de Inglaterra se separa de Roma por motivos pasionales, muchísimos otros personajes consolidan lo que hoy llamamos el protestantismo. Desde hace 500 años la iglesia de Cristo vive fracturada por este Cisma que ha hecho de los bautizados enemigos en los 2 bandos, el norte de Europa protestante, el sur católico, varias son las causas de este terrible cataclismo espiritual y cultural que sigue dividiendo cada día más a la iglesia, al comentar los pasajes del diario espiritual tendremos ocasión de señalar las más  relevantes; la Llama de Amor es una respuesta del cielo a esta obra diabólica  que es la división de la Iglesia.   

Comparte la Llama de Amor

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *