CARTA No.208: Roberto de México, dice
“Soy padre de familia. Tengo cuatro hijos. Estamos conociendo la Llama de Amor. Me gusta la idea de ir pastoreando a mi mujer y a mis hijos. Quiero utilizar la Llama de Amor como instrumento de sanación y liberación en el interior de mi familia. ¿Podría darme algunos consejos para hacerlo?
Respuesta: Te felicito por ese interés de utilizar las gracias de la Llama de Amor para pastorear a tus ovejas. El objetivo del mensaje del Inmaculado Corazón de María es hacer de cada familia un santuario en el que reine su Hijo Jesucristo. No basta rezar el rosario en familia. Es necesario que los padres ejerzan su ministerio poniendo en práctica las enseñanzas que la Virgen nos da en el Diario Espiritual. Los padres de familia deben convertirse en permanentes pastores de sus hijos. El buen pastor conduce, protege, alimenta, cura, libera a sus ovejitas de los ataques y asechanzas de los enemigos. Ojalá todos los padres de familia tuvieran ese interés. El 17 de Enero de 1964 Jesús dice: “Ella quiere que cada familia sea un santuario, un lugar maravilloso donde en unión con ustedes obre sus milagros en el fondo de los corazones”. La falta de pastoreo es la causa de la desintegración de infinidad de familias. La gran tentación de los padres de familia es dedicarse sólo al bienestar material de sus hijos y descuidar lo más importante: “la salvación de sus almas”. La Virgen insiste constantemente en la “salvación de las almas”. Jesucristo pide a Isabel que recoja con Él, que “siga trabajando en el futuro por la salvación de las almas” (DE 8-2-1964).
El ataque de Satanás contra la familia va en primer lugar dirigido a los pastores: padres y madres de familia. Busca confundirlos y desviarlos de los intereses fundamentales, que son los intereses de Dios. Los padres se dejan ganar por el mundo, no pastorean a los hijos, no los protegen, no les enseñan a vivir la fe, a orar, a recibir los sacramentos y entonces viene el desastre. ¿Cómo impedir esta acción Satánica? Cegando al Demonio. ¿Cómo se lo ciega? Orando con el “haz de luz”, la jaculatoria. Lo primero que se debe hacer es establecer en familia los tiempos de oración. Es una prioridad de extraordinaria importancia. Si hay oración, Satanás pierde fuerza. Si no hay oración la familia no tiene capacidad ni luz para defenderse de sus ataques. Debemos tener muy en claro que el primer interesado en salvar la familia es el Padre Celestial. De Él recibimos todos los auxilios. Esta convicción nos fortalece sobremanera. Dios salva a la familia que se vuelve con humildad y amor hacia Él. El Rosario bien rezado es la oración más sencilla, práctica y eficaz. Por allí se comienza. Un segundo punto muy importante es la Hora de adoración reparadora semanal en familia. La Virgen pide que se haga los jueves o los viernes.
A mi manera de ver esta hora debe ser aprovechada inicialmente de manera muy especial para orar por los hijos. Es el gran momento de la oración de sanación y liberación con la Llama de Amor. Más tarde se podrá conservar la hora de adoración reparadora específicamente y establecer otro tiempo sólo para orar por los hijos. Tenemos que aprender a invocar a la Virgen de manera que Ella pueda sanar y liberar. ¿Cómo se hace? De la manera más sencilla. Reunida la familia en oración se le pide a Nuestra Señora que vaya liberando a cada uno de los miembros de las opresiones o ataques de espíritus malignos. Los papás se van dando cuenta de las presencias espirituales negativas por las manifestaciones de la conducta de sus hijos. P.ej: si el hijo se muestra violento, irritado, enojado, sabemos que está actuando un espíritu de ira, de soberbia, de orgullo, de violencia. Se le pide a la Virgen que lo ate, ciegue, enmudezca y expulse a los pies de la cruz de su Hijo. En los siguientes comentarios voy a ir completando estos consejos para que podamos ir aplicando las gracias de liberación de la Llama de Amor a los casos concretos de ataques del enemigo en el interior del hogar.